Clientelismo y dedazo. Por José Luis Calo

¿Cómo influirán los escándalos por corrupción sobre los resultados electorales este 28 de mayo en las próximas elecciones municipales? Ya nada sorprende en nuestra sociedad, tenemos alcaldes investigados por corrupción y vecinos que vuelven a votarles. La mayoría de los estudios internacionales y españoles las conclusiones son similares, prácticamente nulos al tratarse de siglas arraigadas, donde el clientelismo y dedazo mandan. Unas elecciones municipales que marcarán una nueva etapa para el ciudadano, pueden ser un inicio hacia el cambio. Nuestros representantes políticos se centran en las mentiras repetidas, con las que pretenden suplantar la realidad que nos han dejado.
A Voltaire, a quien se le atribuye el aforismo “la política es el arte de mentir a propósito”, se lo han tomado muy en serio los cargos electos de los grandes partidos.
Un gobierno municipal debe generar confianza, la cual se debería haber ganado durante los cuatro años cedidos por la ciudadanía. Pero cuando vemos que las promesas electorales de los que nos gobiernan están pendientes debido a los vaivenes en los cuatro años de gobernabilidad, nos demuestra que estos «personajes» les ciegan los ideales ante el bienestar de los ciudadanos. Lo vivimos en muchas localidades, el ego del mandatario les lleva al amiguismo y a los dedazos.
Actualmente las estructuras jerárquicas de los partidos clásicos, de arriba hacia abajo hacen el «caldo de cultivo» propicio al clientelismo, esto explica el mecanismo que les lleva a su deterioro.
Cuando se inicia la carrera electoral hacia unos comicios, se activan los mecanismos de intercambiar votos a cambio de favores, no sólo en colocación. Estos meses lo veo en mi propio municipio, chocolatadas, fiesta del cocido y viajes a «diestro y siniestro», no sólo se trata de pagar favores por ir en una lista electoral, esto va mucho más allá. Es inadmisible que las administraciones públicas responsables de velar por una gestión adecuada y limpia no tomen medidas ante tal atropello.
La utilización de cargo público para un lucro encubierto en beneficio del mandatario de turno, elimina todos los valores éticos que marcan la trayectoria tan demandada por los ciudadanos.
Eliminemos el clientelismo y el dedazo.
Parece Vd.»La voz del que clama en el desierto»! ¿No observa en esas «cuchipandas» a personajes «no políticos» colocando «sus credenciales» a la vista ,para que el «Alcaldable» cuente con él?.La fiesta «del cocido» con buen vino ,les agudiza el ingenio !
No es fácil eliminar el «clientelismo» ni el «dedazo» y menos ahora, que los puestos bien remunerados ,andan escasos!.
Sus intenciones son excelentes ,pero ¿Convencerá a los que llevan haciendo lo mismo desde 1978 ?.Los demás sufren
una «anestesia» y una pérdida de memoria ,que costará buscar el antídoto adecuado.
La ciudadanía ,(viendo lo que hay) ,disimula en la creencia de que los poderes del Estado los manejan los grandes partidos y eso imposibilita que «tomen cartas en el asunto»,quienes deberían de intervenir, sin que lo denunciase nadie.
Su interrogante inicial acerca de como influirá la corrupción,lo tiene claro :Nunca ha influído y no hay visos de que
vaya a influir .
Los grandes Partidos y sus dirigentes permitieron a los suyos «acomodarse» en el sillón haciendo su «Agosto» y a nadie le ha importado en el pasado,( no vimos «castigo alguno» en las urnas).
Ojalá sea cierto lo que cree que se puede conseguir pero el «dedazo» y el «clientelismo» están muy arraigados en quienes ostentan el poder y a los demás no parece que importe demasiado.!
A Vd. seguro que no lo invitan a esas chocolatadas! , pero al menos, está ahí y lo está intentando !
Mi equipo ha fallado y no pude anotarle como detalle final las palabras de D.Ramón del Valle Inclán :
» En España el mérito no se premia.Se premia el robar y ser sinverguenza.En España se premia lo malo».
Convendrá conmigo en que Valle Inclán era un visionario y aún despues de muerto deberemos de reconocer
que «decía la verdad» y «la historia se repite».
Esto no va de ideologías ni de Partidos….va de lo otro!