“JETIN” es el nombre con el que han bautizado las voluntarias del grupo ecologista Mujeres por Doñana a un simpático raposo que, sin permiso, se ha instalado en el Santuario que estas medioambientalistas gestionan en el entorno de Doñana.
En 100.000 metros cuadrados conviven burritos, caballos, cabritas, así como otros muchos más animales que viven allí recogidos disfrutando de una segunda oportunidad en la vida.
El Santuario “Wendy Clements”, de Chucena-Huelva gestiona una gran cantidad de menús diarios para sus habitantes, pero en estos últimos días les ha llegado del bosque cercano un okupa que se ha apuntado sin permiso.