En el concello de Moaña entregará una nueva carta en nombre de Televisión de Galicia. Conocido ya por su papel de Lino, el empleado de Correos de la serie “Era visto” de TVG, Fábregas se convierte en el Cartero de Televisión de Galicia para dar a conocer lo más sorprendente y desconocido de nuestros municipios en “Sen Código Postal.
El Cartero de Televisión de Galicia contará en Moaña con una cicerone de excepción, Alexandra Franco, técnica en Turismo además de gran conocedora del municipio e impulsora de una de las variantes del Camino de Santiago. Será ella quien se prestará a desvelar algunos de los secretos que rodean al municipio y llevará a Víctor Fábregas a ver lo más característico, lo más desconocido, lo más simpático y lo más sorprendente del entorno.
Comenzamos la ruta hablando del mejillón, el producto estrella de la zona, a bordo del barco del bateeiro Víctor Piñeiro, quine nos comentará el proceso de cultivo y la gran fiesta que se celebra en el mes de agosto.
Después hablaremos con Suso Costas acerca del Festival Intercéltico, una iniciativa puesta en marcha en el año 1985 y que actualmente se ha consolidado como referencia en la música folk a nivel europeo y que además es el único que lleva celebrando casi 40 años de manera interrumpida.
La parte patrimonial vendrá a cargo del arqueólogo Benito Vilas, con quien visitaremos la Torre de Meira; y, finalmente, cerraremos el programa desde el Mirador de Domaio, la segunda montaña más alta del Morrazo y que cuenta con unas curiosas esculturas giratorias en su cima.
“Sen Código Postal”
“Sen código postal” cuenta con un viejo conocido de Televisión de Galicia, Lino, el cartero de “Era visto”, un tipo peculiar y simpático, que siempre va con su bicicleta, su cartera amarilla y su peculiar gorra con anteojos. Ahora está de vuelta para recorrer Galicia y llevar una carta a un vecino para que le enseñe los recunchos de su concello y se gane con eso el reconocimiento de embajador.
El programa permitirá hacer un paseo por nuestra tierra visitando los lugares y vecinos más desconocidos, más simpáticos, más característicos y los más sorprendentes, siempre al juicio de los recuerdos y vivencias de nuestros cicerones.
El humor estará presente en cada uno de los episodios y las bromas entre el presentador y los invitados marcarán el ritmo distendido de este programa que ya cuenta con su tercera temporada.