AlejandraPlaza.Zúrich. La segunda edición del Festival EspañOlé de Zúrich brilló con una destacada presencia gallega, demostrando una vez más la riqueza cultural y gastronómica de España. Este evento, organizado por la Asociación de Restauradores e Importadores de Comestibles Españoles (AGES), se llevó a cabo en el corazón de la ciudad suiza, concretamente en el Zeughausareal, Kaserne.
El Festival EspañOlé incluyó la segunda edición internacional del concurso de paellas y la primera edición del concurso de tapas, ambos con una gran participación y entusiasmo. Además, ofreció espectáculos en vivo y al aire libre durante dos días, creando un ambiente festivo y cultural alrededor de los diferentes puestos de comida. El evento, apoyado por instituciones como Turespaña, Abanca y Estrella Galicia, se desarrolló a pesar del clima lluvioso y la participación gallega se destacó notablemente en varios aspectos del festival.
Concurso de Paellas y Tapas
El concurso de paellas contó con la participación de 21 concursantes provenientes de Suiza, España, Londres e Italia. La competencia fue intensa, con una variedad de presentaciones, sabores y toques personales que hicieron difícil la labor del jurado. Finalmente, Manuel García de Nur Paellas se alzó con el premio a la mejor paella, seguido de Antonio Jiménez de Antonio Paellas y David Soriano. El desfile de paellas fue inaugurado por el grupo As Xeitosiñas de Zúrich que deleitó a los presentes con los mejores sonidos de Galicia, marcando el comienzo de una jornada llena de tradición y sabor.
El primer concurso de tapas fue un gran éxito, convirtiéndose en una explosión de sabores increíbles con presentaciones y combinaciones ingeniosas dignas de cualquier delicatessen. Así, David Soriano se alzó con el primer puesto, Dominik Schmitz con el segundo y Gislaine Albuquerque con el tercero. El jurado, compuesto, entre otros, por el cónsul general de España en Zúrich, Francisco Rabena Barrachina y el consejero económico y comercial jefe de la Embajada de España en Berna,Juan Díez, tuvo la difícil tarea de seleccionar a los ganadores.
Destacada Participación Gallega
Este año, la participación gallega en el festival fue notable. Abanca, con la presencia de su director nacido en Zúrich y con raíces en Carral, José Silveira, y Estrella Galicia, que organizó un concurso de tiradores de cerveza y una cata de su selección de productos, fueron patrocinadores destacados.
La oferta vinícola gallega se presentó con la cosecha Gran Carballo, una línea de vinos exclusivos que tiene un gran éxito en el mercado suizo. La carne en forma de churrasco, chorizos picantes, dulces o criollos, traída de Soneira por Iván Sánchez del restaurante El Español de Buchs, fue un deleite para los comensales.
La pulpería del Carballiño, patrocinada por Abanca, participó por segundo año consecutivo, ofreciendo el auténtico sabor del pulpo gallego.
Innovación y Tradición Gallega
Además de las delicias culinarias, la oferta gallega sorprendió con la incorporación de la marca Costa_da_morte.com. Creada por Martín Caamaño, oriundo de Berdeogas y residente en Basilea, esta marca de la diáspora gallega promueve productos con diseños relacionados con la Costa da Morte, incluyendo calaveras en memoria de los naufragios. Eustaquio, «o percebeiro indomable», es el emblema de la marca y las figuras infantiles están inspiradas en su hija Mía.
«A miña experiencia no evento foi un verdadeiro éxito para a nosa marca. Puidemos dar un novo salto e darnos a coñecer aínda máis fóra das fronteiras. A nosa marca busca crear un vínculo de identidades, tanto dentro como fóra da Costa da Morte. A oportunidade de estar no evento foi fundamental para nós e dounos unha gran visibilidade e promoción.. O ambiente acolledor e a amabilidade e o cariño recibidos en EspañOlé foron incribles. Quero darlles as grazas especialmente a Verónica e a Juanjo por axudarme a ter un recuncho para darnos a coñecer. Un enorme grazas a toda a organización por iso» declaró el emprendedor gallego
La participación gallega en el Festival EspañOlé de Zúrich no solo resaltó la riqueza gastronómica de Galicia sino también su capacidad de innovación y adaptación en el mercado internacional.