El Cortizo buscará prolongar su buena racha en la Vuelta a Castilla y León élite y sub-23

por Redacción Deportes

Los padroneses tratarán de poner el broche de oro al mes de julio en el que han conquistado la Vuelta a Zamora, la Vuelta a Madrid y el subcampeonato de la Vuelta a Ávila.

El Equipo Cortizo regresa este miércoles a la competición para afrontar la última prueba de su particular superjulio. La escuadra padronesa, que viene de brillar en la Vuelta a Zamora con el triunfo final de Maksym Bilyi y dos victorias de etapa, intentará repetir éxitos en la primera edición de la Vuelta a Castilla y León élite y sub-23. Precisamente, el ucraniano será uno de los corredores que serán de la partida en el sexteto dirigido por Modesto Pérez en tierras castellanas, quien también ha convocado a Dani Cavia, Martín Rey, Fran Bennassar, Luis López y Joan Gamundi.

La Vuelta a Castilla y León recorrerá siete de sus cuatro provincias durante cinco días para completar más de 730 kilómetros. La prueba dará el pistoletazo de salida mañana en con una tirada llana de 138 kilómetros entre Riaza (Segovia) y Arévalo (Ávila). Será una jornada con previsible desenlace al esprint en el que Bennassar podría buscar su oportunidad.

La segunda etapa, de 116 kilómetros, unirá las localidades salmantinas de Carrascal de Barregas-Peñasolana y San Esteban de la Sierra, en un día en el que el pelotón ya se adentrará en la montaña para coronar los altos de Valero (1ª categoría) y Los Pajares (2ª categoría). En esta tirada podrían empezar a marcarse las primeras diferencias importantes de la clasificación general, por lo que tocará estar atentos al desempeño de corredores como Bilyi, Cavia o Martín Rey. El de Vilagarcía, ausente de la competición durante el último mes tras sufrir una caída entrenando, reaparecerá en Castilla y León para “ayudar al equipo a seguir ampliando su palmarés”. Rey asegura estar “plenamente recuperado” de las magulladuras de la caída y acude “ilusionado y con la moral renovada” tras la “liberación mental” que le supuso lograr el bronce en los campeonatos de España de ruta hace cuatro semanas.

El viernes, la Vuelta a Castilla y León se desplazará hacia el norte con una tercera etapa de 166 kilómetros entre Fuentesaúco (Zamora) y La Bañeza (León). Oportunidad para las fugas o para ciclistas potentes, antes de la jornada reina del sábado en la Montaña Palentina.  Ese día el pelotón tendrá que hacer frente en la parte inicial a la subida de La Varga (2ª categoría) para encadenar, camino de meta, el  Valle de Santullán (3ª categoría) y la llegada en alto en La Collada (1ª categoría), en Brañosera. Lo que ocurra ese día podría ser definitivo con vistas a la clasificación general, ya que la tirada del domingo entre Tordesillas e Íscar presenta un perfil bastante llano y apunta a una nueva llegada al esprint.

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