La norma que entró en vigor en mayo afecta a locales y oficinas de 283 de los 313 municipios gallegos, principalmente de las provincias de A Coruña y Ourense. Será obligatorio hacer mediciones a partir de este otoño y, en caso de altos niveles de este gas cancerígeno, establecer sistemas de ventilación que eliminen el riesgo
La geología llega a la normativa. El suelo granítico sobre el que se asienta buena parte de Galicia hace que 283 de los 313 ayuntamientos que la conforman registren altos índices de gas radón, un gas cancerígeno al que es mejor tener a raya. Por ello, la nueva normativa que entró en vigor en mayo y comenzará a aplicarse desde este otoño, obliga a las empresas y negocios que tengan locales en sótanos y plantas bajas a hacer mediciones de este gas, dentro de su plan de Prevención de Riesgos Laborales. Para que sus asociados puedan tener informados a sus clientes, el Colegio de Graduados Sociales de A Coruña y Ourense ha celebrado hoy una Jornada Formativa sobre PRL dirigida por el técnico superior en Prevención Enrique García Moreira, de la firma Taprega. La jornada, en línea, se celebra a lo largo de todo el día.
Todos los centros laborales ubicados en planta baja o bajo rasante establecidos en esos ayuntamientos de alta incidencia de radón estarán obligados a medir el gas en sus dependencias y a aplicar sistemas correctivos de ventilación si fuera preciso. El límite establecido por el Consejo Superior Nuclear es de 300 Bq/m³ (benquerelio por metro cúbico), apuntó García Moreira; Los locales tendrán medidores instalados durante un periodo de tres meses y en función de los resultados se establecerán medidas preventivas o correctoras. «No hay que asustarse, pueden ser desde simples medidas de ventilación natural, instalando un aislamiento de membranas antiradón o arquetas de succión con ventilación forzada, dependerá de cada caso», señaló. Lo importante, recuerda, es que la salud de los trabajadores no esté en riesgo.
Prevención de riesgos laborales para las empleadas domésticas
Otro de los temas que centraron la jornada o se refiere a la nueva regulación que amplía los derechos en PRL de las empleadas del hogar. Aún tardará algún tiempo en implantarse pues la Administración se ha comprometido a poner a disposición de los empleadores herramientas para facilitar esa Prevención. «Sin duda es un avance pues se garantiza el reconocimiento médico anual a este colectivo, como al resto de los trabajadores, y la puesta en marcha de una guía técnica en Prevención de Riesgos», explica García Moreira. «Analizamos la norma para que los Graduados Sociales puedan tranquilizar a los empleadores y trabajadoras/es sobre esta nueva normativa porque ha despertado alarmas», explicó García Moreira.