Aunque cada casa es única, todas deberían estar equipadas con un sistema de seguridad doméstico personalizado que esté conformado por los sensores adecuados según sus requerimientos.
Cuando se trata de aumentar la seguridad de casa, es necesario tomarse el tiempo necesario para diseñar cuidadosamente un sistema que se adapte a las necesidades de la propia vivienda y que, al mismo tiempo, satisfaga nuestras pretensiones.
Sensores de seguridad para un hogar
Cada sistema de seguridad se constituye de varios tipos de detectores. Los detectores envían una señal cuando se activan, y en conjunto mantienen los hogares a salvo de casi cualquier amenaza y perturbación. Los más habituales son:
- detectores de rotura de cristales
- sensores de puertas y ventanas
- detectores de humo
- detectores de calor
- detectores de agua
Sensores de intrusión
Los sensores de seguridad para el hogar que pretenden proteger la casa de la entrada de personas desconocidas se denominan sensores de intrusión. Son los más demandados del mercado y existen de varios tipos
Sensores para puertas y ventanas
Los sensores de puertas y ventanas son la base de cualquier sistema de seguridad doméstica. Vienen en dos piezas. Una parte se ajusta a la propia puerta o ventana, mientras que la otra se fija al marco. Ambas se colocan una al lado de la otra, de modo que cuando las dos piezas se separan, envían una señal al panel de alarma.
Se ha de tener en cuenta que estos pequeños sensores no sólo funcionan en las puertas tradicionales, sino que también pueden utilizarse para vigilar varios tipos de armarios dentro de la casa:
- Armeros / Cajas fuertes para armas
- Gabinetes de medicinas / Botiquines
- Armarios para licores y bebidas alcohólicas
- Armarios de herramientas
Sensores de rotura de cristales
Los detectores de rotura de cristales son esenciales para proteger las casas de los intrusos. Los sensores de ventana tradicionales detectan si alguien levanta una ventana que no está cerrada, pero no hacen nada si la ventana está rota. Los detectores de rotura de cristales escuchan el impacto y el tono de la rotura del cristal.
También le ahorran dinero porque pueden cubrir todas las ventanas en un radio de aproximadamente 7-8 metros, lo cual supone un ahorro en la inversión económica necesaria para proteger totalmente una casa.
Detectores de movimiento
Los detectores de movimiento crean un mapa utilizando la energía infrarroja. Normalmente, se ajustan a 45 grados y se colocan en la esquina de una pared. Cuando alguien entra en una habitación, el sensor identifica la temperatura del cuerpo humano y el cambio de energía. Los sensores de movimiento también pueden configurarse en función de la distancia y la sensibilidad.
Sensores de movimiento no sensibles a mascotas
No sólo existen sensores de movimiento tradicionales, sino que también es posible encontrar sensores de movimiento que funcionan bien con las mascotas. Muchas personas tienen miedo de instalar estos detectores por temor a que el movimiento de su mascota active la alarma cuando ellos no están. Pero esto se soluciona con los sensores de movimiento que pueden programarse para que no detecten el movimiento en el suelo, sino que capten el movimiento en un nivel superior dentro de la habitación. De esta forma se hace posible que las mascotas caminen por el suelo sin ser detectadas, mientras que sigue capturando a una persona que pueda caminar por su casa durante un robo.
Sensores de seguridad vital
A menudo, los riesgos ambientales como las inundaciones, las fugas y las temperaturas extremas son más comunes que los robos. Tanto si estamos en casa como fuera de ella, los detectores ambientales nos proporcionan tranquilidad y nos ayudan a minimizar el riesgo de accidentes ante situaciones peligrosas.
Los detectores ambientales suelen instalarse en:
- cocinas
- baños
- lavaderos
- sótanos
Los tipos de sensores más importantes son los que luchan contra el fuego y el monóxido de carbono. Los detectores de humo, los detectores de calor y los detectores de monóxido de carbono ubicados estratégicamente en toda la casa son vitales para maximizar la protección de una familia.