Lemmy bendijo personalmente a Nashville Pussy llamándolos «la última gran banda de rock and roll de Estados Unidos»
Formados en 1997, Nashville Pussy han estado predicando su sórdido evangelio durante las últimas dos décadas junto a bandas como Motorhead en todos los escenarios rockeros del planeta, de Asia a Europa y vuelta.
Criados con una dieta de amplis Marshall, guitarras Gibson, Jack Daniels y hierba, los Nashville Pussy son los hijos bastardos del malhablado y demente hillbilly Blaine Cartwright y de la conductora de tractores, modelo de escuela de arte nudista y prodigio de la guitarra Ruyter. Suys. Nashville Pussy se ganaron rápidamente la reputación de ser como «AC/DC con una Angus femenina», gracias a esos frenéticos solos de guitarra de Ruyter que combinan el blues con el punk y las hilarantes letras de Blaine.
La bajista de la banda, Bonnie «Bon» Buitrago, comenzó como una fan adolescente de la banda que se colaba en sus conciertos, decidida a dar el salto desde la audiencia a miembro de la banda. El nativo de Atlanta y ex paisajista Ben Thomas en la batería se ha hecho rápidamente conocido por su espectacularidad, precisión y sensualidad detrás de su kit.
«Somos el pequeño y sucio secreto del rock ‘n’ roll, felizmente hemos sobrevivido a tendencias musicales que nunca supimos que existían», dice Suys. «Más que nunca, todos necesitamos escapar a algún lugar donde poder fingir que no nos importa una mierda, soltarnos el pelo y volvernos ruidosos, sudorosos y sucios. Nashville Pussy ofrece ese refugio sin pretensiones. Todo el mundo es bienvenido».
Los reyes del Rock sonrieron a Nashville Pussy a la hora de crear el nuevo álbum de estudio de la banda, «Pleased To Eat You». Combinando los talentos del productor Daniel Rey (Ramones, White Zombie, Ronnie Spector y Raging Slab) y el ingeniero de estudio David Barrick (Black Stone Cherry, The Kentucky Headhunters, Marshall Tucker Band), la banda acababa de salir de una gira internacional y estaba ávida de nuevos canciones a las que hincarle el diente.
«Pleased To Eat You» es su séptimo álbum de estudio y sin duda otra grabación histórica de la banda que deberás compartir con tu madre: bourbon, barbacoa, granjas de caballos, buena gente y un gran disco. En serio, difícilmente encontrarás una banda que logre actuar tan fácil, tan rápido y, sin embargo, tan impulsiva como Nashville Pussy, una banda que no se avergüenza de expresar opiniones alto y claro.
«Si ha habido una banda mejor que Nashville Pussy para abrir para Motörhead, nunca la he escuchado» – Lemmy.