La esperada aparición del francés Víctor Wembanyama en la NBA está cumpliendo las enormes expectativas puestas previamente en el pívot de 2,25 centímetros.Tras 9 partidos con San Antonio sus números son más que notables para un novato de 19 años; 20 puntos; 8,6 rebotes, 2 asistencias y 2 tapones por partido en sólo 29 minutos de juego.No son cifras superespectaculares, pero la fluidez de sus movimientos, su rapidez, salto, manejo del balón y tiro denotan que salvo lesiones, este hombre dominará el baloncesto mundial en los próximos 10 o 15 años. Es el primer jugador de su altura que ocasionalmente podría jugar de base.En su debe cabe apuntar a sus bajos porcentajes en el triple, a su malas decisiones en algunos lanzamientos y a sus limitaciones defensivas. Todos ellos son aspectos que seguramente corregirá con los añ
En el último medio siglo uno sólo ha visto a un puñado de jugadores que apuntaban tan alto en su temporada rookie. A saber, Jabbar, Magic, Jordan y LeBron.
El joven gabacho llamado a cambiar la historia del baloncesto tiene otras virtudes y ventajas. Tiene la cabeza muy bien amueblada, aprende con rapidez, es humilde y trabajador y está entrenado por Popovic, uno de los mejores entrenadores de este deporte, ganador de 5 anillos con los Spurs y muñidor de figuras como Duncan, Robinson, Parker, Ginóbili y Leonard.
Por el momento su equipo no es competitivo; hay mucho jugador joven y sólo despuntan dos talentos aún por cuajar; Vasell y Keldon Johnson.
No obstante, es previsible que en dos o tres años su conjunto sea un firme candidato al título.
Wemby cobrará durante sus primeras 4 campañas unos 14 millones de dólares anuales. Una vez transcurrido ese tiempo es más que probable que le ofrezcan entre 70 y 80 millones por campaña.
El paso del tiempo confirmará o no estos pronósticos, pero todos los especialistas apuntan a que cuando se retire el francés podrá ser considerado uno de los mejores jugadores de todos los tiempos.
Foto: Telemundo