RC Deportivo. Escotet: “O se cambia la dinámica de los partidos o se tomarán medidas”

por Gonzalo Soto

No es un artículo de futbol-ficción, aunque pueda parecerlo. El RC Deportivo de La Coruña, SAD, es rehén de una realidad palpable, un barco a la deriva, sin mando, sin rumbo, ni timonel para llevarlo al puerto de Segunda División. Está lejos de ser el equipo de colores blanco y azul, relucientes como los tres jueves del año, que nos habían prometido. La fabulación y la mentira se está adueñando del sentimiento.

A Escotet se le agota la paciencia

Son varios años comenzando la temporada con ilusión, que luego se convierte en humo, que el equipo funciona, pero…, incomprensible, en una entidad que tiene 28.000 carnés, que representan el sentimiento de miles de personas y apoyan incondicionalmente al equipo, provocaran que, la mala gestión del RC Deportivo perdiera la identidad de un Campeón de Liga, dando una imagen exterior penosa. Fernando Soriano, cuando habla, trata de minimizar la situación, luego está la debilitada posición del entrenador, provoca que la presión por ganar le genere ansiedad, otra cosa no es entendible. Presión y ansiedad, mimbres, los tienes buenos, ¿o es que no eran tan buenos los trece fichajes del mercado veraniego y ahora hay que invertir el dinero prestado por Abanca?

A estas alturas, después de casi cuatro años deambulando por la tercera categoría del futbol español, no es entendible, que un equipo con coste de plantilla superior a equipos de Segunda División, esté parasitando fútbol por los campos, con más pena que gloria. Para revertir la situación, hay que poner al frente de la “empresa escarallada”  a las personas adecuadas que sepan de qué va el negocio del fútbol.

La «debilidad» de quien se supone debe tomar decisiones es algo que me sorprende, no logro adivinar la razón por la cual, en la cuarta temporada, no se tomaran decisiones drásticas, solo aplican paños calientes al albur de los resultados. Faltan personas que decidan en el RC Deportivo, que no sean figurantes de una película, cuyo director, depende del dueño del Club y de sus decisiones, consecuencia es, que el equipo no responde a la expectativa creada.

Se cuestiona al entrenador, gana un partido y los aplaudidores de brotes verdes, alaban la fascinante victoria, vendiendo la burra de que vamos mejorando. Llega un partido como el de ayer y otra vez a comenzar con la misma cantinela. Los dirigentes, cuerpo técnico y algunos jugadores han perdido credibilidad, la debilitada posición de quien está al frete del día a día del Club, provoca que el RC Deportivo hoy en día esté fuera del play-off.

Escotet lo tiene claro. O se cambia la dinámica de los partidos, o se tomarán medidas (sic)

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