El verano de 2024, con los eventos de Juegos Olímpicos, Copa América o Eurocopa, se antoja el momento perfecto para modernizar nuestra experiencia
Hace más de medio siglo que algunos de nuestros momentos más inolvidables van de la mano o están vinculados a una determinada experiencia a través de una pantalla. Los televisores de han asentado como parte de nuestras vidas e incluso algunos de los momentos fundamentales en la historia de la humanidad se expresan con el famoso “¿Dónde estabas entonces?”, que también podría traducirse o cambiarse por un “dónde viste a través de la televisión ese determinado momento histórico”. La evolución tecnológica provoca que, además, seamos cada vez más partícipes de una experiencia audiovisual plena, que casi nos transporta hasta el lugar de los hechos, sin apenas notar la diferencia en ese sentido.
Es cierto que la televisión es una compra con permanencia a medio o largo plazo, pero las continuas mejoras, la experiencia y el subidón de calidad de las grandes empresas de streaming, así como un catálogo cada vez más interesante tanto en lo que a divulgación cultural como deportiva se refiere. En este último caso quizás ha llegado el momento para tomar una de las grandes decisiones: se viene uno de los veranos más espectaculares posibles para los amantes del deporte, con la celebración de los Juegos Olímpicos de París, la Copa América así como la Eurocopa. ¿A quién no le gustaría ser el amo de las retransmisiones, con la posibilidad de visualizar a la carta y en 4K o 8K momentos que quedarán con toda seguridad grabados para la posteridad?
Existe prácticamente un televisor para cada necesidad y para cada tipo de público, y prácticamente en cualquier hueco posible existe una medida adaptada y adaptable. Pero lo que es seguro es que la experiencia de visionado en 2024 poco o nada tiene que ver con la que permitía cualquiera de los terminales instalados en buena parte de las casas. Ya por no compararlo con aquellos previos a la etapa del Smart TV. La televisión se acerca cada vez más a la realidad y abandonado totalmente los conceptos y las finalidades de la etapa analógica, para acercarse, y según muchos especialistas superar, la calidad y las posibilidades de broadcast incluso de una pantalla de cine.
Y es que jamás Lebron James, Lionel Messi, Cristiano Ronaldo o Tadej Pogacar estuvieron tan cerca de competir en nuestro propio salón y de hacernos sentir parte de la experiencia de París 2024 o de Alemania en su Eurocopa, dos de los eventos que quedarán a fuego marcados en nuestro recuerdo. Y seguro que al mismo irá asociado un momento televisivo.