Se han retirado árboles secos, enfermos o en peligro de caída, a lo largo de 11,5 km de cauces, incidiendo en las zonas más próximas a infraestructuras de paso
La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS), organismo autónomo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, invirtió más de 100.000 euros en la mejora de la capacidad de desagüe de los ríos del municipio lucense de Triacastela. Los trabajos han sido ejecutados en los cauces da Balsa, Santalla, Oribio y Tras da Pena, en un total de más de 11,5 km.
En la inspección previa realizada se observó la necesidad de mejorar, tanto la capacidad hidráulica del cauce como la composición de la vegetación de ribera, además de detectar gran cantidad de maderas inertes y tapones aislados.
Para solucionarlo, se procedió a la retirada de árboles secos, enfermos o con estabilidad comprometida que presentaban peligro de caída al cauce y que podrían afectar a infraestructuras cercanas. También se realizaron desbroces selectivos de matorral perimetral, poda y clareo de ramas bajas y corta sanitaria de pies secos para evitar tapones.
Como complemento a estas actuaciones, para 2024, en cuanto el caudal permita trabajar con seguridad, se ejecutará una nueva actuación en el regato da Balsa, colindante con Camino de Santiago, con una previsión inicial de ejecución para el mes de junio.