Hace tiempo 21noticias adelantó que, Trashorras no continuaría en el CD Lugo, era jugar con el as de triunfo en la última carta, del juego del Tute. El entrenador estuvo en la cuerda floja en el tercer partido de su vuelta a la escuela, la asesora del presidente le recomendó que debería continuar, no sería bueno volver a cambiar de entrenador, aunque la fijación de Tino Saqués en ese momento era cesarlo y traer a Lemos. La salida, de Roberto Trashorras, abre una enésima crisis en la caja de los truenos rojiblanca. Queda por cuadrar la situación de los otros miembros del cuerpo técnico, que son trabajadores de carácter indefinido en el CD Lugo.
La animadversión manifiesta entre Saqués y Trashorras, acaba con un nuevo capítulo, aunque se espera nuevos párrafos como será la destitución de Diego Sánchez como coordinador de la cantera y una amplia reestructuración de la base con varias salidas. Desde 21noticias podemos contrastar, que uno de los técnicos más longevos de la cantera, estaría negociando con el máximo accionista, ponerse al mando, si bien valora Tino Saqués otras posibilidades, como es un fichaje externo.
Otra pata, la de David Peláez, se encuentra en apuros, aunque tiene un año más de contrato y la salida se antoja como más que probable.
Los líos en la base se han solucionado con una buena lavadora, aunque el descontento de los padres de la mayoría de los jugadores era clara y manifiesta, es otra de las asignaturas pendientes que tiene el CD Lugo sin resolver. Finalizó la competición y una vez más, el ínclito presidente Saqués, está, no solo batiendo el récord de entrenadores cesados, sino el haber logrado, que las bancadas del Ángel Carro comiencen a estar vacías de aficionados que, cansaros de las boutades del presidente, se alejan de un Club, que transita sobre una montaña rusa. El Ángel Carro no es un castillo, ni los aficionados vasallos, aunque el proceder del presidente del CD Lugo, se asemeja más a un señor feudal anclado en el pasado, que a un gestor del Siglo XXI.