El Museo Guggenheim Bilbao presenta Yoshitomo Nara

por Redacción Nacional
Una exposición patrocinada por la Fundación BBVA, Patrono Estratégico del Museo Guggenheim Bilbao desde 1997.
Esta retrospectiva desvela y explora el fascinante mundo del artista: nos embarca en un recorrido por la evolución de su creatividad desde los orígenes de sus ideas. Organizada por temas, más que cronológicamente o según la técnica y los materiales, la exposición nos ofrece una perspectiva de los procesos conceptuales y formales de Nara. La amplia selección de pinturas, dibujos, esculturas e instalaciones creadas a lo largo de las cuatro últimas décadas —de 1984 a 2024— es un reflejo de su empática respuesta a las personas y los lugares que ha ido conociendo a lo largo de los años.

Se trata de la primera gran exposición individual de la obra de Nara que se celebra en España y en un destacado museo europeo. La presentación ha sido concebida expresamente para el espacio del Museo Guggenheim Bilbao. Posteriormente viajará a Baden-Baden y Londres, donde se rediseñará para adaptarse a cada una de las sedes.

Esta retrospectiva está organizada por temas, según el criterio del propio artista. Los temas que se repiten en su obra —incluyendo la casa de tejado rojo, los brotes, el charco, la caja, el barco azul y el bosque— revelan la continuidad de pensamiento que ha mantenido a lo largo de toda su carrera y ponen de relieve su evolución estilística. Nara se considera, ante todo, un pintor, pero explora cada tema en otros materiales y formatos: dibujo, escultura e instalación.

La muestra abarca los cuarenta años transcurridos desde el segundo viaje de Nara a Europa hasta la actualidad y demuestra que la marcha de Nara de Hirosaki y su estancia fuera de Japón fueron cruciales para él, pues le proporcionaron las herramientas necesarias para replantearse su papel como artista y reevaluar su relación con las comunidades de Japón, sus interacciones con la gente y con la naturaleza: «Por fin sentí que tenía las cosas que había echado en falta, que todo lo que pudiera necesitar estaba al alcance de la mano, y fui capaz de vivir en provincias. Pero creo que tuve que dejar mi ciudad natal durante un tiempo para entenderlo».
CATÁLOGO

Esta exposición irá acompañada de un catálogo profusamente ilustrado con textos de Lucía Agirre, comisaria de la exposición, Mika Yoshitake y Shigemi Takahashi, que examinan la obra de Yoshitomo Nara y ponen de relieve las relaciones, armonías y disonancias de sus pinturas, dibujos, esculturas e instalaciones.

PROGRAMA

Conferencia inaugural (26 de junio)
Yoshitomo Nara presentará su exposición al público en un acto que tendrá lugar antes de la inauguración de la muestra. Una exclusiva oportunidad para conocer la exposición de la mano del propio artista.

Reflexiones compartidas*
Encabezadas por profesionales del Museo, estas visitas ofrecen nuevas perspectivas sobre la exposición de Nara:Visión Curatorial (3 de julio): con Lucía Agirre, curator del Museo y comisaria de la exposiciónConceptos Clave (10 de julio): con Luz Maguregui Urquiza, Coordinadora de Educación*Patrocinado por la Fundación Vizcaína Aguirre

Tardeo intergeneracional (6 agosto)
Encuentros organizados en la terraza del Museo charlando sobre gustos musicales en la terraza del museo y visitando a continuación la exposición de Yoshitomo Nara con su preferencia por la música estadounidense de los años 50-60 como punto de partida.

Sesión Creativa +18 Música en vinilo (10 octubre)
Partiendo de la pasión del artista por el vinilo -atesora una extensa colección-, Power Records, un clásico de Bilbao, aproxima en esta sesión la música anterior al punk o new wave que escuchó Yoshitomo Nara en su infancia, en el contexto de la guerra de Vietnam; así como las melodías que se coreaban en los movimientos por la paz y por los derechos civiles de los años 50 y 60.

Viernes Z (25 octubre)
El artista Juan Pablo Orduñez (MawatreS) ofrece un taller inspirado en Nara sobre las manifestaciones sociales y al activismo a cualquier edad. El compromiso social muy presente en su obra y en este caso se trabaja con jóvenes de entre 20 y 30 años en la creación conjunta de una instalación mural.
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