@BibiBloomsFree
El Dépor se enfrenta al Málaga en lo que se ha catalogado como un “partido de alto riesgo”. Sin embargo, los hooligans nazis del Málaga ya han causado estragos en A Coruña. Un bar ha sido destruido y el miedo se apoderó de la ciudad.
¿Qué es lo que más me sorprende? Imágenes que muestran a estos ultras violentos siendo escoltados por la policía hasta el estadio. Sí, escoltados, como si fueran VIPs, no vándalos.
Solo se han realizado un par de detenciones. Imágenes vergonzosas muestran a estos hooligans deambulando por las calles, vestidos de negro, blandiendo barras de metal como si fuera un tranquilo paseo dominical.
Mientras tanto, la fuerza que utiliza la policía en protestas pacíficas es mucho mayor que lo que hemos visto hoy. El contraste es impactante. ¿Por qué aquellos que incitan la violencia son tratados con tanta indulgencia?
¿Quién responde por esto? Cuando la violencia camina de la mano con la protección, necesitamos respuestas.
LaLiga y Javier Tebas presumen de “tolerancia cero” hacia la violencia, pero ¿dónde está la acción cuando realmente importa? Las escenas de hoy en A Coruña son el resultado directo de su fracaso en controlar el hooliganismo.
¿Cómo puede LaLiga presumir de ser una marca global cuando los hooligans nazis tienen carta blanca para aterrorizar ciudades y las autoridades miran hacia otro lado? Tebas necesita dejar de esconderse detrás de relaciones públicas y asumir una verdadera responsabilidad.
Si a LaLiga realmente le importara la seguridad de los aficionados, no estaríamos viendo a los ultras del Málaga desfilando por A Coruña con barras de metal en la mano. La brecha entre sus palabras y sus acciones es vergonzosa.
Tebas y LaLiga: Tienen el poder de evitar esto, pero han fallado una y otra vez. La integridad del fútbol está en juego cuando se permite que la violencia florezca sin control.
Foto portada @LuisR_86 (GUERRERO JAGUAR)