Galicia comprometida con el bienestar físico y emocional. A través de experiencias como el rafting, el buceo, el senderismo y otras experiencias al aire libre, la Asociación Gallega de Turismo Activo (AGETAN) promueve el contacto con la naturaleza como terapia contra el estrés y la ansiedad típicos del otoño
Con la llegada del otoño y la reducción de la luz natural, el Trastorno Afectivo Estacional (TAE) se convierte en una preocupación creciente para miles de personas. Este tipo de depresión, que afecta aproximadamente al 5% de la población en las regiones templadas, tiene un impacto notablemente mayor en las mujeres, con una proporción de 4 a 1 en comparación con los hombres. En España, se estima que 1 de cada 10 personas experimenta síntomas significativos relacionados con este trastorno, que se manifiesta a través de cambios de ánimo severos durante los meses de otoño e invierno.
Para combatir el estrés, la depresión y el sedentarismo que aumentan en esta época, la Asociación Gallega de Turismo Activo (AGETAN) promueve el turismo en la naturaleza como una poderosa herramienta para el bienestar emocional. AGETAN destaca que las actividades de aventura al aire libre son un aliado para mitigar estos efectos, especialmente en una época en la que los días se acortan y el estado de ánimo tiende a decaer.
La actividad física al aire libre no solo mejora el estado de ánimo, sino que también reduce el cortisol y libera endorfinas, fundamentales para combatir la depresión estacional. Estudios de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Asociación Americana de Psicología demuestran que pasar tiempo en la naturaleza disminuye el estrés y mejora la salud mental.
El trastorno afectivo estacional, en síntomas
El trastorno afectivo estacional (TAE) es un tipo de depresión que se presenta principalmente en otoño e invierno, cuando hay menos luz solar. Los síntomas comunes incluyen:
- Bajo estado de ánimo: sensación persistente de tristeza o vacío.
- Falta de energía: cansancio extremo y dificultades para realizar tareas diarias.
- Aumento del sueño: dormir en exceso pero sin sentir descanso.
- Apetito elevado: especialmente hacia carbohidratos y dulces, lo que a menudo causa aumento de peso.
- Pérdida de interés en actividades que solían disfrutarse.
La naturaleza gallega como terapia
AGETAN ofrece en Galicia multitud de opciones para quienes buscan equilibrio emocional a través de la actividad física. Actividades como el senderismo, el kayak y las rutas de montaña permiten a los visitantes adentrarse en parajes tranquilos de las cuatro provincias, donde el silencio y el contacto con la naturaleza actúan como antídotos contra el estrés y la ansiedad.
Para los más aventureros, la oferta variada y su contraste de montañas, ríos, bosques y costas, garantiza el escenario perfecto para la práctica del turismo activo durante el otoño e invierno:
1. Rafting en otoño, la mejor época
Los ríos gallegos, gracias a las lluvias otoñales, alcanzan en estas semanas sus niveles óptimos de caudal, lo que garantiza descensos más intensos y rápidos.
Localizaciones destacadas como los ríos Miño y Sil en Ourense, el río Ulla en A Coruña y el río Eo en Lugo ofrecen una vivencia única y emocionante. Los rápidos de estos ríos desafían a los aventureros mientras disfrutan de una panorámica única de montañas, bosques frondosos y verdes valles. El entorno tranquilo y alejado del bullicio urbano, junto con los guías locales especializados, aseguran una experiencia segura y memorable.
2. Buceo en uno de los ecosistemas más ricos de Europa
La costa gallega, bañada por el Atlántico, es conocida por su biodiversidad marina, y el buceo es una excelente manera de conectar con la naturaleza y olvidarse del estrés diario. Además, esta actividad ofrece una experiencia de total desconexión, ya que el silencio del fondo marino y la concentración necesaria para la inmersión ayudan a calmar la mente y reducir la ansiedad. Entre las mejores localizaciones para practicarlo cabe destacar la Ría de Arousa, famosa por sus aguas cristalinas y su diversidad marina.
3. Barranquismo para todos los niveles
Galicia, con su terreno montañoso y su exuberante vegetación, ofrece algunos de los mejores descensos de barrancos de España.
La Sierra de O Courel, en Lugo, es uno de los destinos favoritos para practicar esta actividad, con rutas como las del río Lor, el río Quiroga o el barranco de las Casdas. Estos barrancos ofrecen una mezcla perfecta de caídas de agua, saltos, rápeles y zonas de nado, todo ello rodeado de un paisaje espectacular. Además, la Sierra de Ancares, también en Lugo, presenta barrancos de gran dificultad y belleza, como los de río de las Tres Villas o el barranco de Fontán, ideales para los más aventureros. Por su parte, la Costa da Morte en Coruña ofrece descensos de gran belleza, como los del río Xallas, donde las cascadas y pozas naturales se convierten en el principal atractivo.
4. Rutas en bicicleta por montañas, costas, bosques y valles
Disfrutar de paisajes únicos para ciclistas de todos los niveles puede ser una experiencia tan relajante como emocionante.
La diversidad de rutas en Galicia permite descubrir desde las que recorren la antigua vía del tren como la vía Verde del Eo a panorámicas sobre los cañones del Sil y el río Miño en la Vía verde de la Alta Galicia; descubrir pueblos pintorescos, bosques y praderas en la Ruta del Río Sor o de montaña como las existentes en la Sierra de O Courel o la Sierra de Ancares.
5. Escalada en impresionantes formaciones rocosas
La Costa da Morte, en A Coruña, es uno de los destinos más emblemáticos de Galicia para la práctica de la escalada, gracias a sus imponentes acantilados, rocas y formaciones geológicas únicas sobre el océano Atlántico, proporcionando unas vistas espectaculares y una experiencia de escalada intensa y desafiante.
La Sierra de O Courel, en Lugo, es otro de los destinos más buscados por los amantes de la escalada, con paredes de granito ideales para practicar en un entorno natural y tranquilo. Otras zonas recomendables para la escalada son la Sierra de Ancares, la Vía de los Arrieiros en el municipio de Chantada, y la Montaña de O Xistral, donde los paisajes de montes y valles son el telón de fondo para una experiencia que combina el deporte con la naturaleza.
6. Paddle surf por ríos y rías
Cada vez más popular, el paddle surf permite disfrutar de los entornos naturales de costa e interior de manera relajada y accesible para todos los niveles.
En las Rías Baixas, en la provincia de Pontevedra, se encuentran algunas de las mejores localizaciones para practicar este deporte, como la ría de Arousa y la ría de Vigo, cuyas aguas protegidas y tranquilas son ideales para disfrutar de un paseo en tabla con paisajes inolvidables. Otra zona destacada para esta práctica es la ría de Muros y Noia, en A Coruña, que se caracteriza por sus aguas calmadas y su entorno de naturaleza virgen.
En el interior, los ríos de Galicia también son escenarios perfectos para la práctica de este deporte: el río Miño y el río Eo permiten realizar recorridos tranquilos y relajantes rodeados de un paisaje rural impresionante.
Los más aventureros pueden optar por el río Sil, que ofrece un desafío mayor debido a sus rápidos y zonas de mayor corriente. Además, la Costa da Morte, famosa por sus acantilados y su mar embravecido, presenta una opción para los más experimentados, que podrán disfrutar de su belleza mientras practican paddle surf en sus aguas más tranquilas.
Amelia García, secretaria de AGETAN y propipetaria de la empresa Atlantis Aventura, destaca cuál es el objetivo de la asociación en la realización de estas actividades. «Garantizar que estas experiencias sean seguras y reguladas, promoviendo el turismo activo responsable. Es fundamental que los usuarios elijan empresas certificadas, ya que esto asegura que se cumplen todos los estándares de calidad y seguridad». Además, el compromiso de la asociación se extiende también a la sostenibilidad del sector para proteger el entorno, así como a la propia salud de los visitantes: «queremos garantizar un turismo activo y seguro, en un ambiente natural que inspire a las personas a encontrar su bienestar. Combatimos no solo el intrusismo, sino también el sedentarismo, fomentando una vida activa y saludable», ha añadido.
Beneficios en la salud mental y física del turismo activo
Muchos testimonios revelan cómo el turismo activo ha cambiado vidas: desde quienes han superado la ansiedad mediante el barranquismo, hasta parejas que encontraron en el puenting una forma de reconectar y dejar atrás el estrés cotidiano. «El contacto con la naturaleza y la actividad física generan cambios profundos en el ánimo y en la calidad de vida», afirma Amelia, resaltando el impacto positivo que esta modalidad de turismo tiene en la salud mental.
Además de mejorar el estado de ánimo, el turismo activo ayuda a reducir la presión arterial, fortalece el sistema inmunológico y reduce el riesgo de enfermedades relacionadas con el estrés y el sedentarismo. La Asociación de Turismo Activo de Galicia promueve iniciativas y colaboraciones para asegurar que todas las actividades cumplan con los estándares de seguridad y sean accesibles a un público amplio, brindando una experiencia segura y de alta calidad.