La balear Carla Jaume se ha proclamado esta tarde en el Pabellón Municipal de Deportes de Pontevedra subcampeona del mundo U20. Un hito que parecía muy lejano ya no lo es tanto para la lucha española, que ha alcanzado su primera final en un gran campeonato tras muchos años de esfuerzo por parte de las federaciones, técnicos y entrenadores. Al fin, el trabajo y el sacrificio de tantas personas tiene premio.
Carla, campeona nacional y bronce europeo en la categoría de 53kg, suma ahora a su brillante palmarés una plata muy especial que le da un nuevo impulso a su carrera. En su último año como juvenil, la del Club de Lluita Sa Formigueta ha desplegado todo ese potencial que se le veía desde que empezó a practicar este deporte. La temporada que viene ya competirá con las U23, un escalón aún más difícil, pero para el que se ve preparada después de completar un verano fantástico que no la ha bajado del podio.
En su final contra la china Jin Zhang, doble campeona de Asia que ha controlado los últimos torneos con autoridad concediendo muy pocos puntos, Carla no ha tenido el mejor día, pese a salir convencida de sus posibilidades y motivada por todo el publico presente en las gradas. La china la ha dominado y ha sentenciado el combate por tocado.
La derrota no empaña en absoluto su competición, con victoria ante la rumana Rotaru, la nipona Yumiya, principal favorita, y la india Jyoti. Tres rivales de mucha entidad que no pudieron con el descaro y el talento arrollador de la luchadora española.
Tras recibir el apoyo de la práctica totalidad del equipo nacional en su paso por vestuarios, Carla salió a la ceremonia de entrega de medallas recompuesta y satisfecha por su subcampeonato. Subió al segundo cajón del podio con una sonrisa, agradeciendo emocionada al público presente, y se colgó una plata que sabe a oro entregada por Francisco Javier Iglesias, presidente de la Federación Española de Lucha.
Luego, recibió la llamada de Maider Unda, la referencia absoluta de este deporte en nuestro país. La medallista olímpica en Londres 2012 la felicitó y la empujó a seguir progresando. Quizá, quien sabe, el día de mañana la balear pueda incluso superarla.
Carla viajará en los próximos días de vuelta a su tierra, donde a buen seguro la recibirán con honores. Allí seguirá entrenando, pese a que su temporada prácticamente ya ha acabado, con el ánimo de pulir tantos detalles como se pueda y prepararse para un nuevo nivel: una categoría U23 en la que ojalá pueda seguir sumando victorias.