Mil millones de dólares: ese es el valor estimado del mercado de cannabis medicinal en España. Hablamos de una nación que fue pionera en el año 2015 cuando lideró el camino en la despenalización del cannabis recreativo. Sin embargo, hoy en día se encuentra muy por detrás de países como Alemania.
La ausencia de un marco legal y una infraestructura para el cultivo de cáñamo se hace notar en los pacientes que la emplean como medicina. Muchos afirman seguir teniendo dificultades para acceder a estos medicamentos, teniendo que comprarlos fuera en países donde su comercialización sí está regulada. Esta falta de legitimidad hace que los pacientes todavía sientan que llevan a cabo prácticas ilícitas y sin una institución a la que acudir para recibir orientación.
Épocas de cambios necesarios para el cannabis medicinal en España
Cuando Mariano Rajoy y el Partido Popular perdieron el poder en 2018, había una gran expectativa de que la llegada de Pedro Sánchez del PSOE anunciaría una era dorada para el cannabis. Sin embargo, como han informado sitios para comprar productos con CBD como cannaconnection.es, las cosas no salieron como la mayoría de la gente esperaba.
Durante ese año, Sanidad se negó a considerar el uso medicinal de la marihuana. Esta acción era contradictoria respecto a la posición de los parlamentos autonómicos donde el PSOE se proclamaba a favor de esta idea.
La llegada al gobierno había infundido muchas esperanzas en que se trabajara por la regulación del cannabis para uso medicinal. Esto debido a que el partido en muchas comunidades autónomas se había proclamado favorable incluso a legalizar el cannabis no solo para uso médico, sino también recreativo.
Los pacientes en tratamiento con cannabis medicinal no cuentan con ningún tipo de control, seguridad jurídica o médica. Además, este retraso les genera mucho estrés, ya que sienten que viven en la ilegalidad. Al tener que cultivarla en casa para realizar sus preparados medicinales, temen que la planta desprenda demasiado olor o que los vecinos llamen a la policía.
Estados Unidos se confunde ante el atraso de España
España y más específicamente Cataluña, representan el epicentro del mercado ilegal de cannabis en Europa. Tan solo en 2021, la policía allanó más de 600 plantaciones. Hablamos de una nación con un clima perfecto para cultivar la planta, por lo que países como Estados Unidos, se muestran desconcertados ante el atraso en su legalización.
Además, la proximidad de España a África y su posición en el Mediterráneo lo convierten en un punto estratégico para el contrabando de esta planta. Ante estas condiciones, los esfuerzos por regular el cultivo y comercialización de cannabis medicinal o recreativo no son suficientes en el país.
De hecho, la demanda local parece incrementarse, ya que, en 2021, la policía arrestó a casi el doble de personas por delitos asociados al cannabis, en comparación con el 2016. El enfoque de este país sugiere que es peligroso tomar medidas a medias cuando se trata de una sustancia como el cannabis. De momento, su consumo está despenalizado para uso personal en un lugar privado y siempre que la persona tenga menos de 100 gramos.