El mercado de segunda mano de vehículos sigue en alza, motivo por el que son ya muchos los que buscan una guía que les sirva de referencia para saber en qué fijarse antes de decantarse por un coche u otro de la amplia oferta que hay.
Gencar Automoción, expertos en la compraventa de vehículos de este tipo tiene claro cuáles son los 6 puntos a revisar, algo que hacen de forma exhaustiva antes de volver a poner una unidad a la venta.
- Condiciones mecánicas: es necesario verificar el estado del motor, la transmisión y otros aspectos mecánicos del vehículo. Asegurarse de que no haya fugas de líquidos, como aceite o líquido de transmisión evitará luego tener que afrontar esas averías. No estaría de más echar un vistazo al último cambio de neumáticos o batería.
- Historial de mantenimiento: Cada vehículo y propietario debe custodiar y actualizar el historial de mantenimiento del vehículo para verificar si ha recibido los servicios y reparaciones necesarios y a tiempo. Esto dará una idea de cómo se ha cuidado el automóvil y si ha tenido problemas recurrentes.
- Carrocería y pintura: Revisar de forma visual el exterior del vehículo en busca de abolladuras, rasguños o signos de óxido es el primer gesto que se hace, y es necesario. Uno de los lugares que más habría que mirar es el espacio alrededor de las ruedas y los paneles de las puertas.
- Interior del vehículo: Un interior limpio y en buen estado suma y ayuda a la decisión. No está de más poner en marcha los sistemas de aire acondicionado, calefacción, ventanas eléctricas, sonido y cualquier otro componente electrónico para verificar su funcionamiento.
- Documentación y legalidad: El vehículo debe disponer de todos los documentos necesarios para poder venderse. Entre ellos, la reserva de dominio, la tarjeta de circulación, y las de las revisiones de ITV. También es importante asegurarse de que el número de identificación del vehículo (VIN) coincida con los registros y que el automóvil no tenga problemas pendientes, como multas o embargos. Esto puede revisarse en Tráfico.
- Prueba de conducción: Antes de finalizar la compra, se recomienda siempre una prueba de conducción para comprobar cómo reacciona el vehículo en carretera, frenada y si el conductor se adapta y va cómodo en él. Además, sirve para poder prestar atención a cualquier ruido inusual, vibraciones o problemas en la dirección.