“Un año más el “bloqueo” de la Consellería de Medio Ambiente de Xunta de Galicia nos impide ejecutar una obra tan importante y necesaria para este tramo lucense del Miño”, indicó Quiroga
La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS), organismo autónomo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, continua a la espera del informe de la Xunta de Galicia para el traslado de las especies de náyades ubicadas en el río Miño en la zona donde se desarrollaran las obras de restauración del azud de Aceña de Olga, lo que obliga a suspender, nuevamente, las obras.
“Un año más el “bloqueo” de la Xunta de Galicia nos impide ejecutar una obra tan importante y necesaria para este tramo lucense del Miño”, indicó Quiroga. “Estamos decepcionados y desconocemos a que obedece esta falta de respuesta, teniendo en cuenta que la conselleira, en declaraciones a los medios efectuadas el pasado 11 de julio, indicó que el traslado sería autorizado teniendo en cuenta que se trata de una de colonia de apenas 2.000 ejemplares” añadió el presidente
“En la solicitud efectuada el pasado mes de mayo, se hacía especial hincapié en que el plazo de ejecución era de 3 meses desde la autorización y en que sólo se podría trabajar en época de estiaje” añadió Quiroga
“Estamos ante una actuación estratégica para este Organismo ya que resuelve un problema de protección y recuperación de patrimonio cultural protegido, además de garantizar la permeabilidad longitudinal del río para la ictiofauna y la mejora del estado de la masa de agua” matizó Quiroga.
“Nos vemos obligados a suspender las obras nuevamente lo que implica un importante riesgo de deterioro de este importante elemento patrimonial en los meses de intenso caudal, con el consiguiente gasto adicional que conlleva el repetir estudios y prospecciones el próximo año” incidió el presidente.
“Tal y como hemos anunciado, la CHMS restaurará y cederá el Muiño de Olga a la Universidad con el interés de divulgar el valor de las infraestructuras fluviales tradicionales ubicadas en la parte lucense de la demarcación del Miño-Sil, siendo imprescindible el arreglo de la aceña como elemento clave de este importante conjunto patrimonial” explicó Quiroga.
Además, la recuperación de esta infraestructura garantizaría una lámina de agua estable que permitirá la práctica de actividades de piragüismo y remo en unas condiciones adecuadas y seguras, para este tramo del río Miño, aguas arriba de la Aceña de Olga.
Por último y muy importante, indicar que el ZEC Parga, Támoga, Ladra de la Red Natura 2000 se extiende hacia aguas arriba del tramo del río Miño influenciado por la existencia del azud, y la Directiva Marco del Agua establece la obligación de alcanzar o mantener el buen estado de las masas de agua. Por ello, se estima que para mejorar la conservación de los ecosistemas de dicho espacio fluvial protegido y garantizar el buen estado de la masa de agua, resulta conveniente mejorar la conectividad longitudinal el río. “Desconocemos las razones de la Consellería de Medio Ambiente para paralizar una obra tan importante y necesaria en este tramo lucense del Miño” concluyó Quiroga.