El Partido Popular se solidariza con los vecinos de la zona y pedirá explicaciones al alcalde
Con el precedente de los graves altercados ocurridos el pasado verano en las fiestas de Santa Cruz derivados de la falta de efectivos policiales, desde el Partido Popular de Oleiros expresan “nuestra preocupación ante la época estival a la que nos aproximamos y el gran número de festejos que se celebran por todo el municipio”.
El pasado fin de semana se celebraron las fiestas de San Cidre (San Isidro), en Perillo, y como suele ser habitual en este tipo de eventos, se han registrado ya los primeros incidentes y el balance inicial resulta desalentador: una agresión sexual sufrida por una menor de 14 años, que fue atendida en el “punto violeta” y requirió de asistencia de la Policía Local -única patrulla presente-, una decena de casos de intoxicación etílica entre menores de edad, principalmente, y una pelea entre varios grupos de jóvenes. La falta de medios que se destinan a este tipo de eventos resulta igual de incomprensible cuando, a pesar de las peticiones de la Comisión de Fiestas, el concello instala únicamente tres WC portátiles para las 3.000 personas que se congregaron, según las primeras estimaciones.
“No puede ser que a las primeras de cambio la situación se repita una y otra vez.” -señaló Loli Silva, portavoz municipal del PP- “Si bien es cierto que no hay que olvidar la responsabilidad de quien vende alcohol a nuestros jóvenes menores de edad, no es menos cierto que el Concello hace dejación de funciones al autorizar fiestas y eventos de los que se desentiende al no garantizar la seguridad necesaria para un desarrollo normal de los mismos. El concello exige a las Comisiones de Fiestas garantías en materia de responsabilidad civil y planes de autoprotección para autorizar la celebración de las fiestas pero es competencia municipal velar por el cumplimiento de las obligaciones impuestas en materia de autoprotección, ejerciendo la inspección y el control de la autoprotección.”
Loli Silva denunció que “a pesar de los lamentables precedentes que supusieron los altercados registrados en las fiestas del pasado verano, resulta sorprendente que el ayuntamiento incumpla la legalidad y a estas alturas continúe sin planificar las fiestas de este verano. Prueba de esta falta de planificación es la presencia de una única patrulla de la Policía Local para un evento que congregó a 3.000 personas el pasado fin de semana en Perillo. Vamos a exigir al Concello las copias de los planes de prevención y de autoprotección de todos los eventos y también que garantice el control y la seguridad de los oleirenses y nuestros visitantes en estos festejos.”