La XXXI edición de la feria Alfaroleiros ha sido un éxito sin precedentes, atrayendo a una de las mayores afluencias de público de su historia. La intensa ola de calor no impidió que miles de personas se acercaran al Parque Luis Seoane de Santa Cruz, donde la sombra de los árboles ayudó a mitigar las altas temperaturas.
Desde el pasado miércoles, el parque se convirtió en un gran escaparate de la alfarería tradicional. Cientos de piezas de barro, con diseños y precios variados, llenaron los puestos de los artesanos. Los visitantes pudieron encontrar desde objetos de uso cotidiano, como ensaladeras o tazas, hasta piezas decorativas, creativas y exclusivas que rinden homenaje al propio concello de Oleiros.
Cifras que confirman un éxito sin precedentes
La afluencia de público fue constante durante los cinco días de feria, tanto por la mañana como por la tarde, y las actividades paralelas registraron una alta participación. Los datos de ventas también confirman el triunfo de esta edición: las 6.000 bolsas oficiales de la feria se agotaron antes de que finalizara el evento, lo que evidencia que las ventas se contaron por miles.
Armando Moita Domingues, alfarero de Coimbra (Portugal), destacó que solo en los dos primeros días de feria vendió más que en toda la edición del año anterior. Este éxito reafirma el papel de la feria como un motor económico para el sector artesano y un importante polo de atracción turística y cultural para la zona.
La feria Alfaroleiros, ideada hace más de 30 años por el Gobierno municipal para apoyar a los talleres tradicionales en un momento de declive, se ha consolidado como una cita ineludible. El Concello de Oleiros continúa apostando por este evento para preservar la memoria cultural y garantizar que la tradición alfarera siga viva, conectando a las nuevas generaciones con un legado que forma parte de la identidad colectiva de la región.
