Un mensaje enviado ayer pocos minutos después de las 6 de la tarde a Monterroso, elevó la tensión en el ANPA del CEIP de la localidad, tras la mala gestión a lo largo de la mañana del viernes donde se dio el problema al percibir los niños el olor a quemado en la entrada del centro y donde nadie del equipo directivo ni de la Consellería tomó medidas. El viernes se tuvo constancia de que varias personas del equipo de cocina del centro se sintieron indispuestos con náuseas, mareos y vómitos, con la única decisión de abrir las ventanas y poco después cerrarlas.
Al remate de la jornada del viernes, una medición realizada por un familiar de un alumno del centro, realizó una medición de gases que daba tales estándares con lo que el desalojo del centro debía ser inmediato. Pocos minutos después, un profesional en la materia, corroboró los hechos.
Según fuentes del ANPA del centro, varios niños presentaron dolores de cabeza, náuseas y vómitos. En la tarde del sábado, un incendio en las instalaciones provocó una gran humareda, lo que pudo poner en peligro a los niños el propio viernes y ocasionarse una importante urgencia, que afectara a más de 200 alumnos que tiene el centro.
Desde la dirección del centro no se notificó nada hasta las 20.00 del sábado, con la duda de que fuera una decisión propia la cual debiera llevar una serie de medidas o bien, si estuvo asesorada por personal de la Consellería de Educación, lo que en este caso tendría que llevar a la toma de decisiones inmediata. Desde entornos cercanos al colegio, se conoce la relación directa de la dirección del centro con la persona que ostenta la jefatura de Inspección, siendo esta persona la que llevaba el centro cuando accedió a la dirección y con varias decisiones en las cuales se cambiaron las indicaciones previas de los profesionales que llevaban el centro en estos meses pasados.
La gota que colmó el vaso, fue la notificación de la Jefatura Territorial de Educación, en la que se indicaba que todo seguía igual, pero que los niños deberían ir un poco «más abrigados» al centro, en una falta absoluta de profesionalidad y donde el ojo del huracán vuelve a ponerse por decisiones rocambolescas. ¿Quién dio esa indicación? ¿La Jefatura Territorial o la jefatura de inspección?
