Tocaba votar una petición del PP, reprobar al ministro Óscar Puente por el aislamiento y abandono que somete a la ciudad de Lugo, recientemente condecorado” con la V de vecino ejemplar, cuyo mérito era conocer a Lugo porque está en el mapa.
Y llego el esperpento. En el Pleno Municipal de hoy en el Ayuntamiento de Lugo, el BNG se posicionó con la proposición presentada por el Partido Popular y dejó sola a Paula Alvarellos.
Esta situación ha visibilizado que Lugo está gobernada por dos partidos políticos que ya no esconden sus diferencias, la falta de liderazgo de Paula Alvarellos es manifiesta, dando auge al colíder de la oposición a no apoyarla, como se ha visibilizado hoy, perdiendo otra votación. Paula Alvarellos y el PSOE recibieron un sonado desplante del BNG, apoyando la moción del PP donde reivindicaba el grupo que lidera Elena Candia, más infraestructuras para que Lugo no quede aislado. Candia agradeció el voto a favor del BNG para reprobar a un político al que Lugo nada le debe.
A Paula Alvarellos se le está haciendo muy largo el camino como alcaldesa, han pasado nueve meses, cada vez es más notorio su falta liderazgo y este lo está aprovechando el BNG, con desplantes como el de hoy. ¿El grupo de gobierno no consensúa antes del pleno las votaciones? De no ser así e ir BNG y PSOE cada partido por su lado, velando únicamente por sus intereses, no por los de los vecinos de Lugo, las divergencias serán cada vez mayores y los grandes perjudicados, como siempre serán los vecinos de la ciudad del Sacramento.
¿Se ha roto el pacto de Gobierno a dos, o se mantendrá por intereses políticos? O, ¿el BNG seguirá acopiando más poder ante una débil Paula Alvarellos? El BNG busca en la izquierda el bolso de votos de la alcaldesa, Rubén Arroxo es consciente que, en el único caladero por donde puede pescar, es el del PSOE.